






¿Os he hablado de lo bonita que es/está Barcelona? 😀 😀
Mucha gente, demasiada ya, atestando las calles del centro, que se amplía a los barrios que rodean el casco histórico y Paseo de Gracia. Supongo que se hace insoportable quedarse en casa con tanta noticia catastrófica y tener el ojo en la factura de la luz. Las fotos son del 22 de mayo, se agredece el día despejado, aunque ¿quién se acuerda hoy, a 30 ºC, de los interminables días nublados à la belge? A mí me da grima bañarme en la Barceloneta, pero es una playa tan tan fotogénica…
En febrero de este año el puerto OneOcean Port Vell no estaba aún recuperado, pero ya se veían más yates que en los meses previos, cuando todavía había restricciones por la pandemia. Si no me equivoco, los superyates de los rusos suelen amarrar en el lado opuesto. La irreversible especialización de Barcelona en la búsqueda del turismo de lujo no tiene vuelta atrás, un aliciente para los descuideros y relojeros. Es el inconveniente de levantar hoteles de lujo y de gran lujo al final de las Ramblas, a un tiro de piedra del Raval. Los turistas han regresado en masa a las mismas zonas, y los manteros tienen también muchas ganas de regresar a estos puntos amplios y de tanto paso, donde también es fácil recoger rápidamente los bártulos y salir por piernas. Se verá.